En la Universidad Jaume I de Castellón

 

El pasado 16 de noviembre ‘el perruco’ impartió un taller de Educación Emocional a través del juego dirigido a docentes en el II Congreso Internacional de evaluación e intervención en Inteligencia Emocional.

Durante la primera jornada del congreso, Inteligencia Emocional en los entornos educativos, pudimos escuchar las emotivas iniciativas llevadas a cabo con éxito en los centros educativos Ramiro Izquierdo, IES Miralcampo y Colegio La Magdalena. Signo, todas ellas, de que las cosas están cambiando, si no de una manera oficial desde las administraciones, sí que de una forma práctica por los propios centros: Programas de Educación Emocional, de Aprendizaje-Servicio, Expresión Emocional a través de la Creatividad… Profes y directivas comprometidos con una Educación que va más allá del desarrollo cognitivo, que también.

Y tras estas inspiradoras intervenciones, ¿Qué hicimos? ¡Pues JUGAR! ¿Qué si no? Más de 60 asistentes al congreso, en su mayoría profes pero también psicólogos, orientadores, miembros de asociaciones para el desarrollo de la Inteligencia Emocional, directores de colegio y estudiantes, jugaron a los juegos de ‘de perruco… ¡a perruco!’, nos permitieron explicarles nuestra trayectoria y los beneficios del juego en general y de los orientados al desarrollo de la Inteligencia Emocional en particular y experimentaron por sí mismos el entorno favorable que propicia el juego para la comunicación y la expresión emocional.

Con un primer juego de atención, vimos cómo el interés, la curiosidad y el reto son vitales para el aprendizaje. Después, tras mostrar el camino que nos ha llevado a la creación de juegos, echamos unas partidas con el juego de ‘el perruco’ en el que pudieron comprobar de primera mano cómo este juego promueve la identificación y expresión de las emociones en un entorno seguro y su utilidad en el aula y en la familia.

Finalmente acabamos jugando unas partidas de EMOCIÓN!, nuestro último juego que, con la representación de 12 familias de emociones y 5 niveles de intensidad en cada una de ellas, tiene como objetivo ampliar nuestro vocabulario emocional y, en combinación con el ‘Emociómetro’ (otra excelente herramienta para el aula) hacernos reflexionar acerca del significado de las emociones y de la fuerza con la que se presentan.

Más tarde, pudimos asistir a otro taller maravilloso de Lidón Blanch y Fernando López que, bajo el título de “Senti-2” (Mindfulness docente) y con la participación de sus alumnos, nos hizo experimentar y tomar conciencia de mil y un sensaciones a través de los sentidos.

Terminaron la jornada la intervención de Mª José Antoni, que ha implementado con éxito un programa de mejora del bienestar emocional en la plantilla de Cuinatur, que ha conseguido mejorar la empatía, la comunicación afectiva, la resolución de conflictos y la cohesión grupal en el equipo de trabajadores dedicados a una actividad tan relevante para la Educación como es la de los comedores escolares, y las brillantes exposiciones de Gabriele Giorgi de la Università Europea di Roma y Edgar Bresó Esteve, Director del Máster en Inteligencia emocional y Coaching de la Universitat Jaume I que nos hizo ver, con su gran capacidad comunicadora, la importancia de entender el entorno y la problemática de una organización antes de implementar un programa de desarrollo de la Inteligencia Emocional estándar.

En definitiva, una jornada llena de emociones que trató, además, toda la metodología de medición y evaluación de la Inteligencia Emocional, antes y después de una intervención, desde el rigor científico.

Muchas gracias a la Fundación Universitat Jaume I por contar con nosotros y muchas gracias Martín SánchezBegoña Andrés y, por supuesto, Edgar Bresó por vuestra cordialidad y profesionalidad.