Crowdfunding y listado de mecenas
Tras el curso “Inteligencia Emocional y Educación” (UNED Madrid, 2016), surgió la idea de EMOCIÓN! queríamos crear un juego de mesa para ampliar el vocabulario emocional y al mismo tiempo hacernos conscientes de las distintas intensidades en las que se manifiestan las emociones.
Posteriormente hemos reafirmado nuestra idea de la necesidad de crear nuevos materiales didácticos de educación emocional donde se aprenda de forma natural, sin esfuerzo y a través de la diversión.
En un principio trabajamos sobre una idea muy clara y sencilla, se trataba de 12 familias de emociones y sentimientos con 5 intensidades cada una, diferenciadas por colores, números y emoticonos. Al presentar nuestro primer prototipo en las tiendas, gustó mucho la idea y un experto en juegos nos aconsejó que fueran más coloridas y divertidas si queríamos atraer a los más pequeños. Esa sugerencia nos encantó y con la idea de las familias de emociones y sus intensidades, nos pusimos a crear las ilustraciones, también revisamos y retocamos algunas emociones, y así llegamos al nuevo resultado, mucho más divertido para los peques y también para los mayores.
El siguiente paso era buscar financiación. Como ya habíamos hablado con algunas editoriales y no nos convencían sus condiciones, nos decidimos por el Crowdfunding, dónde “puedes” conseguir la financiación a través de pequeñas (o no tan pequeñas) aportaciones de personas que confíen en el proyecto y quieran hacer una compra por anticipado, eso sí, con alguna ventaja por su aportación.
Nos decidimos por la plataforma Verkami, que nos pareció muy orientada a los juegos. Nos pusimos en contacto con ellos para contarles nuestro proyecto y empezamos a trabajar. La búsqueda de recompensas, los presupuestos, la información, las fotografía, ilustraciones y simulaciones, el vídeo de presentación… todos los contenidos que pedían en la plataforma para presentar el proyecto nos dejaron agotados. Así que cuándo ya lo completamos todo, ¡¡¡Nos lanzamos al vacío!!!
Pensamos que sería un momento genial empezar el “Día de San Valentín”, y así lo hicimos. Sin precampaña, sin contactar con prescriptores, hala! a la buena de Dios!!! Pusimos algún post en facebook, en Google+ y en pinterest, dimos la barrila a los amigos, pero eso no avanzaba y nos desinflamos totalmente. Así que, después de una meditación de mindfulness, empezamos a llamar a gente que nos pudiera echar un cable. Y empezamos a trabajar, en Verkami nos ayudaron, revisamos los pasos, hicimos un par de prototipos y contactamos con algunos prescriptores, ¡la respuesta fué genial! y empezamos a subir la recaudación. Pero luego se volvía a estancar, así que a poner post, a enviar emails, a llamar a gente (aún pensando que estábamos siendo pesados), y poco a poco, muy poco a poco, fuimos subiendo hasta conseguir el total de la financiación a dos días de cerrar la campaña.
Han sido cuarenta días de intensas emociones (muchas veces en el número 5 de la baraja), hemos tenido muchos altibajos, mucho estrés y mucha satisfacción al permitirnos contactar con las personas que nos han ayudado. Pero lo que más hemos sentido, ha sido agradecimiento, agradecimiento a todas estas personas que han confiado en nosotros y que nos han animado durante el proceso.
Aquí compartimos los nombres de nuestros queridos mecenas y va por delante nuestro cariño y gratitud.